Calado

Calado

Calado en cerámica es una técnica decorativa que consiste en perforar patrones o diseños en la superficie de una pieza cerámica. Este método crea áreas translúcidas que permiten el paso de la luz, añadiendo una dimensión visual y táctil a la pieza. El calado puede realizarse con herramientas especializadas que cortan o perforan la arcilla antes de la cocción, o mediante la aplicación de moldes que dejan impresiones en la superficie. Esta técnica no solo embellece las piezas cerámicas, sino que también puede servir para reducir el peso de la pieza sin comprometer su integridad estructural. El calado es comúnmente utilizado en jarrones, platos, lámparas y otros objetos decorativos, permitiendo la creación de patrones intrincados que destacan por su delicadeza y precisión. Además, el calado puede combinarse con otras técnicas decorativas, como el vidriado o el biselado, para lograr acabados más complejos y personalizados.

Dato interesante

En la cerámica contemporánea, el calado se utiliza para crear estructuras translúcidas que permiten el paso de la luz, como lámparas y candelabros, combinando funcionalidad con arte. Este uso innovador del calado no solo añade una dimensión estética, sino que también transforma las piezas cerámicas en objetos interactivos que juegan con la luz y las sombras.

Consejo útil

Para obtener un calado limpio y preciso, asegúrate de que la arcilla esté bien preparada y uniforme antes de aplicar la técnica. Utiliza herramientas afiladas y realiza movimientos controlados para evitar desgarros o imperfecciones. Es recomendable practicar en piezas de prueba para dominar la técnica antes de aplicarla en tus obras finales, garantizando así patrones definidos y detallados.