El bióxido de manganeso es un colorante cerámico que se emplea principalmente para obtener colores negros y marrones oscuros. Su aplicación no solo aporta un tono profundo y opaco, sino que también genera efectos texturizados y reactivos al combinarse con otros óxidos, lo que lo hace ideal para esmaltes con variaciones de color.
Además, el bióxido de manganeso es conocido por su capacidad de promover efectos moteados o cristalizados en la superficie del esmalte, y en ciertas formulaciones puede inducir cambios de color al interactuar con otros componentes durante la cocción. Este material también es útil en esmaltes de alta temperatura, donde ayuda a lograr acabados mate o satinados, contribuyendo tanto a la estética como a la durabilidad de las piezas.
Dato interesante
El manganeso ha sido utilizado desde la prehistoria como un colorante cerámico, y su uso se puede rastrear hasta la cerámica neolítica.
Consejo útil
Usa bióxido de manganeso en pequeñas cantidades, ya que es un material fuerte que puede dominar otros colores del esmalte. Además, debido a su toxicidad, trabaja siempre en un espacio bien ventilado y con equipo de protección adecuado.