Óxido de níquel (NiO)

Óxido de níquel (NiO)

El óxido de níquel es un colorante versátil en cerámica, valorado por su capacidad para producir una amplia gama de colores, que incluye tonos grises, verdes y marrones en esmaltes y engobes. A pesar de no ser tan popular como otros óxidos metálicos, como el cobalto o el hierro, el óxido de níquel ofrece una paleta única y sutil que resulta especialmente atractiva en esmaltes experimentales y decorativos. Una de sus características destacadas es su capacidad para cambiar de color según las condiciones de cocción y la composición de la mezcla en que se emplea. En atmósferas de cocción oxidadas, el óxido de níquel puede crear grises fríos o verdes pálidos, mientras que en atmósferas reducidas o en combinación con otros componentes, puede generar marrones profundos y verdes cálidos, agregando complejidad y riqueza visual a las piezas. Es conocido por ser un colorante "misterioso" o "caprichoso," ya que sus resultados pueden variar notablemente incluso con ligeros cambios en la atmósfera de cocción o la composición del esmalte, lo que permite a las ceramistas jugar con sus efectos y descubrir tonalidades únicas.

Dato interesante

Además de sus aplicaciones en cerámica, se utiliza en otros campos para crear efectos de color. En la fabricación de vidrio, por ejemplo, el óxido de níquel puede generar tonos que van desde el violeta hasta el gris, dependiendo de la concentración y las condiciones de producción.

Consejo útil

Usa óxido de níquel en concentraciones bajas, ya que puede ser tóxico. Asegúrate de manipularlo con cuidado y trabajar en un área bien ventilada, utilizando guantes y equipo de protección adecuado.